En mi primer post publicado, hablaba de lo romántico del Viaje y de todo lo que rodea ese romanticismo, ya sea el arte, la cultura o las gentes que te encuentras y conoces. Si hablamos de rutas históricas que a día de hoy se han convertido en un recorrido turístico nos viene a la mente las peregrinaciones religiosas, ya sean a Santiago de Compostela, La Meca, Jerusalem, etc. Rutas históricas hay muchas, culturales millares y artísticas ya solo en Europa existirán más que municipios en España y eso ya son…Pero quizás una de la rutas por carretera más apasionantes, y conocidas pero a la vez poco transitadas, sea la Ruta 66 en EEUU de América que separa las ciudades de Chicago (Medio-Este) de Santa Mónica, Los Ángeles, al Oeste del país. Más de 4000 km de carretera separan estas ciudades atravesando desiertos, montañas y parajes espectaculares.
De romanticismo hablábamos y es que esta carretera ha sido protagonista en diferentes películas de Hollywood, libros y programas de TV. El sobrenombre con el que se la conoce «The Mother Road» (La Carretera Madre) fue escrito por primera vez por el periodista John Steinbeck, autor de la novela Las Uvas de la Ira (TheGrapes of Wrath, 1939), entre otros trabajos, la cual John Ford, plasmó en la gran pantalla, realizando un trabajo excepcional, gracias en parte a la actuación de Henry Fonda, interpretando al protagonista Tom Joad.
Pero quizás la pregunta es saber ¿qué tiene de especial este tramo de asfalto que separa la tercera ciudad de EEUU de la segunda? Pues yo diría que bastante. Si esta carretera pudiera hablar nos diría que todo radica en el romanticismo y en la esperanza de quien la ha recorrido. La Carretera 66 fue inaugurada en el año 1926, tras la Primera Guerra Mundial. Aquellos eran los tiempos de la bonanza económica, del sueño americano, hasta que llegó, el que todos llamaron el Jueves Negro en Octubre de 1929 y su tan conocido Crash del 29, que hundió la economía del país hasta entonces más rico del planeta.
Tras la guerra se introdujo el sistema Fordiano en muchas empresas, por lo que el coste de producción caía, haciendo que los precios descendieran y se reactivara la economía más . El dinero brotaba y Wall Street «regalaba» acciones de empresas. Esto comenzó a acrecentar una economía especuladora ya que lo que comprabas hoy por 1 mañana lo vendías por 3…¿Esto no os suena a nada? Cometemos los mismos errores una y otra vez. Existe una frase atribuída a John Rockefeller en la que decía que cuando su limpiabotas le hablaba de comprar acciones, él vendía las suyas y es que este sistema de «oportunidades» no está pensado para todos, ha de haber ricos y pobres. Pero no me quiero ir por las ramas. EEUU, 1929, una crisis económica asola el país entero y por si fuera poco, los estados del centro del país, despensa de EEUU, sufre unas sequías muy graves y todas las cosechas se arruinan. Esto lo llamaron «Bowl Dust» Bowl de Polvo. Las familias perdieron sus granjas, casas, trabajos a manos de los bancos y es aquí cuando entra en juego la Ruta 66, ya que son todas estas familias y desahuciados los que emprenden un viaje a través del asfalto en busca de trabajo y esperanza en las fértiles tierras de California.
Como he dicho anteriormente el libro Las Uvas de la Ira, de John Steinbeck nos narra la historia de la familia Joad, quienes, desahuciados deciden emprender ruta hacia California, desde el Estado de Oklahoma en busca de una mejor vida.
El año pasado realicé el viaje a través de la Ruta con varios amigos. Fue una experiencia inolvidable que quisiera compartir.
Parte 3 – Lincoln – Oklahoma City
Parte 4 – Oklahoma City – Flagstaff
Parte 5 – Flagstaff – Los Ángeles
Post publicado por David Peris Navarro 23/11/2012